El Boletín de Calificaciones de Playas 2022

Resumen ejecutivo
Las calificaciones durante la temporada seca de verano fueron excelentes en todo el estado, 94 % de las playas de California recibiendo calificaciones A y B, lo cual está a la par con el promedio de cinco años. Las calificaciones durante la Temporada Seca de Invierno estuvieron ligeramente por debajo del promedio con 88% de las playas que recibieron calificaciones A y B. Las calificaciones de la Temporada Lluviosa del año pasado estuvieron un poco por encima del promedio con 66% de las playas que recibieron calificaciones A y B.

Los condados costeros están experimentando sequías moderadas o extremas y han recibido un 24 % menos de precipitaciones que el promedio histórico. Las precipitaciones por debajo del promedio pueden haber resultado en ligeras mejoras para las calificaciones durante la Temporada Lluviosa porque se redujeron las cantidades de contaminantes, incluidas las bacterias. Sin embargo, la reducción de las precipitaciones no siempre da como resultado mejores calificaciones, en nuestro último informe encontramos que la precipitación de California es un 41 % más baja que el promedio histórico y que los calificaiones de la Temporada Lluviosa son más bajas que el promedio. La investigación ha encontrado que la duración y frecuencia de las tormentas pueden tener un gran impacto en las concentraciones de bacterias en el océano, lo que puede explicar las diferencias entre las calificaciones de la Temporada Lluviosa de este informe y del anterior.

  • Playa Blanca cerca de Tijuana es la numero en la lista de las Peores Playas de este año. Esta playa y otras en el área se ven afectadas por el escurrimiento urbano contaminado con aguas residuales del área metropolitana de Tijuana, que tiene una infraestructura de alcantarillado insuficiente y en algunos lugares, inexistente. Esta playa también puede recibir flujos de contaminación de aguas residuales provenientes de la planta de tratamiento Punta Bandera al norte de esta playa.
  • El condado de San Mateo ha producido el mayor numero de Peores Playas que cualquier otro condado en los últimos años. Por tercer año consecutivo, Erckenbrack Park esta en la lista de las Peores Playas; Marlin Park está haciendo su segunda aparición consecutiva; y Lakeshore Park ha estado en la lista por cinco ocaciones en los últimos 10 años. Estas playas están encerradas en un mosaico de canales de poca circulación de agua, en donde la contaminación no se elimina fácilmente de las playas.
  • El muelle de Santa Mónica, que alguna vez fue una de las principals playas en la lista de las Peores Playas, vuelve a aparacer nuevamente ocupando la posicion número cuatro de esta lista. La última vez que el muelle de Santa Mónica apareció en la lista de las peores playas fue en 2018. Los funcionarios de la ciudad de Santa Mónica han declarado que planean reemplazar la malla deteriorada que excluye a las aves debajo del muelle. Las aves atraídas por el muelle son una fuente potencial de contaminación fecal.
  • Marina Del Rey Mother’s Beach es el hogar de dos ubicaciones en la Lista de las Peores Playas de este año, lo cual no es una sorpresa dada la historia de esta playa. La mala calidad del agua ha persistido desde el inicio del Boletín de Calificaciones de Playas hace más de 30 años. Las características que hacen de esta playa un gran destino para familias, la hacen también para la contaminación bacteriana. Esta playa está encerrada dentro de Marina Del Rey, por lo tanto, tiene poca acción de olas o de circulación de agua. Eso significa que la contaminación bacteriana no se elimina de la costa como lo hacen en playas de mar abierto. El condado de Los Ángeles ha implementado muchos proyectos de mejora de calidad del agua en el área, pero las características físicas aquí dificultan la eliminación de los altos niveles de contaminación.
  • Moonstone Beach County Park en el condado de Humboldt está haciendo su primera aparición en esta lista. playa recibe aportes de contaminación del Little River que desemboca en el océano en este lugar. Un estudio realizado en la cercana playa Clam Beach encontró que las aves, vacas y perros fueron fuentes de contaminación fecal, aunque se necesita más investigación para evaluar los riesgos para la salud en el Parque del condado de Moonstone.
  • Vaughn’s Launch en el condado de Orange es un lugar de muestreo dentro del área de Newport Bay State Marine Conservation. La natación y la pesca no están permitidas aquí, pero sí el kayak y paddleboard; el lugar más cercano para botes es el Centro Acuático de Newport Bay. Vaughn’s Launch se ve afectado por un arroyo cercano que lleva escurrimientos urbanos de los vecindarios circundantes. Los funcionarios locales han trabajado para abordar ciertos contaminantes del área, canalizando el agua potencialmente contaminada a través de un estanque de retención con vegetación natural. Sin embargo, el depósito de retención no se construyó para filtrar bacterias indicadoras fecales, por lo que no sabe qué tan efectivo es contra la contaminación fecal. Se sospecha que las poblaciones naturales de aves son la razón de los altos recuentos de bacterias, pero se necesita más investigación para respaldar esa afirmación.
  • Tijuana Slough, aproximadamente a una milla al norte de la desembocadura del río Tijuana, estáen la posicián número 10 de este año. Esta ubicación se ve afectada por la contaminación de las aguas residuales que el río Tijuana lleva al océano. La infraestructura deteriorada e insuficiente de alcantarillado de la Ciudad de Tijuana envía cada año millones de galones de aguas residuales al Río Tijuana y al océano Pacífico. Las investigaciones recientes también han demostrado que las descargas de aguas residuales parcialmente tratadas de la planta de tratamiento Punta Bandera en Tijuana, fluyen hacia el norte e impactan las playas en la región fronteriza.

Las playas de Oregón no fueron monitoreada con la frecuencia suficiente para recibir una calificación durante la Temporada Seca de Verano, ni tampoco durante los meses de invierno. Solo seis condados recibieron calificaciones durante la Temporada Lluviosa y solo el 57 % de las playas recibieron calificaciones A y B, que fueron las más bajas (79 %) del promedio histórico del estado.

Las calificaciones del estado de Washington durante la Temporada Seca de Verano fueron del 79% de las playas que recibieron calificaciones A y B, y que está muy por debajo del promedio del 96%. Las calificaciones durante la Temporada Lluviosa de Verano fueron excepcionales e iguales al promedio histórico, con un 94% recibiendo calificaciones A y B. Desafortunadamente, no se monitorearon las playas de Washington durante los meses de invierno, por lo que no se pudo calcular las calificaciones la Temporada Seca de Invierno.

En el área de Tijuana, se encontraron niveles preocupantes de contaminación en tres playas de monitoreo. El Faro y El Vigia recibieron una D durante la Temporada Seca de Verano, mientras que Playa Blanca recibió una F y terminó en nuestra lista de las Peores Playas. Las tres playas recibieron calificaciones de F durante las temporada Secas y Lluviosas de Invierno.

Durante el último año, las aguas de la Costa Oeste sufrieron varias descargas contaminantes catastróficas que pusieron en peligro la salud pública y de nuestros ecosistemas costeros. Este “verano de derrames” fue el resultado de múltiples fallas de infraestructura, exacerbadas aún más por la falta de notificación pública de parte de las agencias públicas. Una red de alcantarillado rota envió siete millones de galones de aguas residuales al Canal Domínguez, un área que desemboca en el océano cerca de Long Beach, California. Desafortunadamente, ese incidente fue eclipsado por otra ruptura de tubería en la Planta Internacional de Tratamiento de Aguas Residuales al norte de Tijuana, en el lado estadounidense de la frontera. Esa rotura envió por varias semanas casi mil millones de galones de agua contaminada con aguas residuales al océano Pacífico. Un derrame de aguas residuales de 13 millones de galones de la planta de Tratamiento Hyperion de Los Ángeles fue el resultado de una falla en el sistema de eliminación de basura de la planta. Los residentes del condado de Los Ángeles no fueron notificados de los posibles riesgos para la salud hasta aproximadamente 20 horas después de que ocurriera el derrame. En el mes de octubre, se filtraron 25.000 galones de petróleo de un oleoducto frente a la costa de Huntington Beach, California. El derrame de petróleo cerró las playas debido a la naturaleza tóxica del crudo y sus vapores. En una narrativa muy común, los residentes y visitantes del Condado de Orange no fueron notificados sino hasta la mañana siguiente de lo ocurrido.